Derrame alcohol.
Hola amigos. La siguiente historia es de esas que se cuentan a los niños para evitar que ellos lo repitan. Ayer me encontré a un matrimonio por la calle con dos niños, y le dice la madre al hijo: - Mira miguelito, si fumas vas a acabar como ese pobre chico.
El caso es que el viernes fui a un derrame rock. Habria llevado la guitarra si no me hubiera dicho mi madre: "Hijo, tu serías un buen cantante de no ser por la voz". Aún recuerdo esas duras palabras. Di que yo le recompsé diciéndole lo de: "mamá mamá, yo estoy bien, pero entre las drogas, el alcohol y la puta del final (130 euros) me he gastado el sueldo del mes mío, y el de papá". Bueno dejémonos de rollos y vamos a lo importante. Era viernes creo, las 5 de la tarde, el bosque estaba lleno de gente con las tiendas de campaña y bebida, mucha bebida.
Tres horas más tarde ....
Eran las 8 de la tarde, yo estaba tirado al pie de la tienda de campaña, me faltaba un solo trago para el coma etilico, intenté arrastrarme por el suelo y chupar un poco de la botella pero dos ángeles recién caídos del cielo me lo impidieron y me metieron a la tienda para que durmiera.
Al día siguiente uno se levanta con el estomago que parece una labadora y no se me ocurre otra cosa que echar una pastilla de la alergia en la litrona y tragarmela. "los vecinos" no se lo podían creer. Se pensaban que era una especie de extraterrestre, uno se llegó a pensar que yo era el espíritu santo y que me habían enviado para acabar con todo lo malo del planeta tierra, lo que no bebia me lo fumaba. Bueno, pues lo primero que hice fue beber bastante agua y sentarme en la pradera. Me acuerdo de una frase que dijimos: "hoy vamos de tranquis para aguantar hasta el final".
Dos horas mas tarde ...
Abro un ojo y escucho: "¿Bueno, empezamos a beber?" Yo ya casi no me tenia en pie pero me levanté como pude, cogí una garrafa que tenian allí unos tipos y les dije: "voy al pueblo a por agua" (5 km ida, 5 km vuelta). Y sí, el agua estaba rica pero pillé una pequeña insolación que me dejó k.O. Al poco rato fuimos a beber por los bares y todo lo demás está un poco borroso. Supongo que iríamos a cenar a un restaurante de tres tenedores y que estuviéramos charlando de la subida de la bolsa con unos ejecutivos de New York.
Cuando me levanté llamé a mi madre ...
- Mamá tengo una buena noticia y una mala.
- Dime hijo dime.
- Una es que estoy bien.
- ¿ Y la buena ?